Un ecosistema es el conjunto de especies de un área determinada que interactúan entre ellas y con los componentes del ambiente. Los organismos vivos que conforman los ecosistemas incluyen diversas especies de flora y fauna, así como también insectos y microorganismos. Los componentes abióticos son la energía solar, el agua, el viento y los elementos inertes del suelo, como las rocas o la arena.
Según el grado de intervención humana, los ecosistemas pueden clasificarse en:
- Ecosistemas naturales. Son aquellos que se desarrollan sin intervención del ser humano. Son mucho más variados que los artificiales y han sido extensamente clasificados. Por ejemplo: bosque, desierto, río.
- Ecosistemas artificiales. Son aquellos en los que hay un elevado grado de intervención humana y no existían previamente en la naturaleza. Por ejemplo: embalse, invernadero, parque.
- Ver además: Biodiversidad
Ejemplos de ecosistemas naturales
- Ríos y arroyos. Son corrientes de agua que fluyen continuamente. En ellos pueden vivir peces, crustáceos y multitud de insectos y anfibios. Las plantas son principalmente algas de agua dulce.
- Lagos y lagunas. Son ecosistemas formados en cuerpos de agua que, según su profundidad y origen geológico, pueden considerarse lagos o lagunas. Contienen una gran variedad de vida animal y vegetal.
- Bosques. Son ecosistemas en los que predomina la vegetación arbórea. Son el hábitat de distintas especies, entre ellas, monos, ciervos, felinos, variedad de aves y roedores. Cuando se encuentran en climas húmedos y cálidos y la vegetación es muy exuberante, se los denomina selvas.
- Desiertos. Son ecosistemas que se caracterizan por las bajas precipitaciones. Pueden ser de clima cálido o frío. La flora y la fauna están adaptadas a la baja disponibilidad de agua en el ambiente.
- Fondo marino. Debido a la ausencia total de luz y las grandes presiones, los nutrientes disponibles son muy escasos. Este ecosistema no ha sido suficientemente explorado, por lo que solo existen hipótesis sobre sus habitantes. Muchas de las especies que se encuentran en las profundidades son bioluminiscentes, es decir, que tienen adaptaciones para producir su propia luz.
- Marismas. Suelen encontrarse cerca del mar, en áreas que permanecen parcial o totalmente cubiertas de agua. La flora y la fauna están adaptadas a la abundancia de agua y a la elevada salinidad.
- Praderas. La vegetación dominante son las gramíneas, los juncos y los pastos. Suelen estar profundamente intervenidas para la práctica de actividades económicas como la agricultura o la ganadería.
- Tundras. Se encuentran en la región norte de Rusia y Canadá. Están formadas por árboles resistentes a las bajas temperaturas.
Ejemplos de ecosistemas artificiales
- Embalses. Se forman cuando se construye una represa para generar energía hidroeléctrica o prevenir inundaciones. Tienen un comportamiento ecológico parecido al de las lagunas.
- Campos de cultivo. Son ecosistemas fuertemente intervenidos por los seres humanos. Suelen tener poca variedad de especies (en general, predomina un solo cultivo) y muchas veces son fumigados con distintos tipos de productos químicos, como herbicidas o insecticidas, lo que altera el equilibrio ecológico del ecosistema.
- Invernaderos. Son una forma particular de ecosistema de cultivo en el que las temperaturas y la humedad son elevadas como consecuencia de la construcción del invernadero. A diferencia de los campos de cultivo, este ecosistema no es afectado por el viento, la lluvia ni los cambios de temperatura, ya que todos esos factores se encuentran controlados por el productor.
- Parques. Son ecosistemas urbanos que se construyen artificialmente como espacio de recreación en las ciudades. En general, los árboles, las lagunas y el césped que conforman los parques son creados por los seres humanos.
Tipos de ecosistemas naturales
Existen tres tipos de ecosistemas naturales: los acuáticos, los terrestres y los mixtos.
Ecosistemas acuáticos
Los ecosistemas acuáticos son aquellos en los que el componente principal del medio natural es el agua. Pueden ser de dos tipos: de agua salada o de agua dulce.
- Ecosistemas marinos o de agua salada. Son los ecosistemas en los que predomina el agua salada y unos de los más antiguos, ya que la vida en nuestro planeta surgió en el mar. Son más estables que los ecosistemas de agua dulce o el terrestre, debido a las lentas variaciones de temperatura.
- Ecosistemas de agua dulce. Son los ecosistemas en los que predomina el agua dulce.
Ecosistemas terrestres
Los ecosistemas terrestres son aquellos que tienen lugar en la tierra, es decir, fuera del agua. Comprenden una amplia variedad de biomas como bosques, pastizales, desiertos y tundras. Sus servicios ecosistémicos son fundamentales para el equilibrio ambiental y el bienestar humano, ya que proporcionan recursos, regulan el clima y ofrecen hábitats a una gran biodiversidad.
Ecosistemas mixtos
Los ecosistemas mixtos se caracterizan porque se desarrollan en áreas donde la tierra y el agua convergen. Estas zonas tienen una dinámica natural única que se da entre ambientes húmedos y secos, y conforman hábitats de especies animales y vegetales que se adaptan a ambos medios de vida. Los manglares y los humedales son ejemplos de ecosistemas mixtos.
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Referencias
- Acosta, M. B. (2019). Ecosistema artificial: qué es y ejemplos. EcologíaVerde. https://www.ecologiaverde.com/
- Cortes, J. y otros. (2020). Ecosistemas marino-costeros. En: Moreno, J. M., Laguna-Defior, C., Barros, V., Calvo Buendía, E., Marengo, J. A. y Oswald Spring, U. (Eds.). Adaptación frente a los riesgos del cambio climático en los países iberoamericanos. Informe RIOCCADAPT. McGraw-Hill.
- Juste, I. (2024). Tipos de bosques. EcologíaVerde. https://www.ecologiaverde.com/
- Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible. (s.f.). ¿Qué son los humedales y por qué es importante conservarlos?. https://www.argentina.gob.ar/
- National Geographic. (s.f.). Ecosistemas acuáticos. https://www.nationalgeographic.es/
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