En la historia sudamericana, se conoce como unitarios y federales a quienes formaban parte de dos bandos o partidos políticos del siglo XIX, que defendían proyectos de organización nacional contrapuestos. El enfrentamiento entre ambos fue especialmente importante en las recién independizadas Provincias Unidas del Río de la Plata, territorio equivalente a las actuales Argentina y Uruguay.
A grandes rasgos, el Partido Unitario buscaba organizar el país de manera centralizada, subordinar las provincias al gobierno nacional y conservar como sede del poder central a la antigua capital del Virreinato del Río de la Plata: Buenos Aires. Además, defendía el libre comercio y la modernización económica.
Por su parte, el Partido Federal buscaba organizar el país como una república federal, en la que cada provincia fuera autónoma y el poder central solo contara con unas pocas facultades delegadas, como las relaciones externas. En cuanto a sus proyectos económicos, variaban según las regiones a las que representaban sus distintos representantes.
El Partido Unitario y el Partido Federal se enfrentaron en varias ocasiones entre 1814 y 1835. El momento más crítico se produjo entre 1828 y 1831, cuando estalló una guerra civil que terminó con un triunfo federal y permitió la consolidación del poder de Juan Manuel de Rosas, gobernador de Buenos Aires, quien paradójicamente gobernó la Confederación Argentina con métodos centralistas hasta su derrocamiento en 1852.
Este conflicto no terminó del todo con la llegada al poder de Rosas, pues antiguos unitarios se unieron a los liberales y otros opositores al rosismo y contribuyeron a su caída. En 1853, se estableció una Constitución nacional de carácter federal, aceptada por todas las provincias menos por Buenos Aires, que recién la reconoció en 1860.
A lo largo del período conocido como de “organización nacional”, entre 1852 y 1880, se logró un acuerdo para establecer una economía liberal y aperturista, junto a un modelo de organización federal, si bien este proceso no estuvo exento de conflictos militares. También se declaró a la ciudad de Buenos Aires como capital de la nación en 1880.
La lucha entre unitarios y federales constituyó un capítulo importante, aunque violento, de la historia argentina, y fue retratado en importantes obras de la literatura regional, como El matadero (1871), de Esteban Echeverría (1805-1851), y Facundo o civilización y barbarie (1845), de Domingo Faustino Sarmiento (1811-1888).
- Ver además: Estados unitarios y federales
Diferencias entre unitarios y federales
Las diferencias fundamentales entre los proyectos del Partido Unitario y el Partido Federal pueden resumirse de la siguiente manera:
Unitarios | Federales |
---|---|
Defendían la necesidad de que la provincia de Buenos Aires, por su importancia económica, histórica y estratégica, fuera la sede de un gobierno central que ejerciera la autoridad y el dominio administrativo sobre el resto de las provincias. A este modelo se lo llamó “centralista” o “unitario”. | Defendían la necesidad de que se organizara un gobierno federativo, en el que las provincias conservaran su autonomía política y administrativa, y el gobierno nacional funcionara de acuerdo con los intereses económicos de las provincias. A este modelo se lo llamó “federal”. |
Estaban en su mayoría ubicados en la provincia de Buenos Aires, antigua capital del virreinato colonial, aunque tenían líderes y seguidores en las demás provincias. | Estaban dispersos a lo largo de las distintas provincias que componían el territorio nacional, incluida Buenos Aires, y algunos caudillos tenían agendas y políticas propias. |
Consideraban que la nación preexistía a las provincias, es decir, que estas eran apenas divisiones del territorio nacional y no estados propiamente dichos. Su modelo de país se inspiraba en la Francia napoleónica. | Entendían el país como la unión voluntaria de un conjunto de provincias, que podían beneficiarse de constituir una república, pero debían respetar sus autonomías para defender sus intereses. Sus modelos de país variaban desde la tradición hispánica hasta Estados Unidos. |
Su militancia y sus apoyos eran mayormente capitalinos y estaban conformados por miembros de las clases sociales medias y altas de Buenos Aires, y de algunas capitales provinciales, así como de muchos intelectuales y militares. Era un partido urbano, liberal, cosmopolita y modernizador. | Sus apoyos provenían mayormente del ámbito rural, tanto de estancieros y campesinos, como de gauchos. Sus militantes se agrupaban en milicias llamadas “montoneras”. Sus líderes eran caudillos regionales y algunos intelectuales que pertenecían a los sectores dirigentes de sus provincias. Era un partido tradicionalista y conservador. |
En lo económico, defendían el libre comercio y proponían la creación de un banco central que centralizara la emisión de moneda. Además, consideraban que el gobierno central debía administrar el presupuesto nacional y luego asignar los recursos correspondientes a cada provincia. | Su postura económica variaba según las regiones. A grandes rasgos, se dividía en dos: el litoral argentino defendía el libre comercio y la libre navegación de los ríos, mientras que las provincias del interior defendían el proteccionismo económico. Ambos bandos se oponían al dominio porteño sobre sus economías locales. |
Sus líderes máximos fueron Bernardino Rivadavia, Juan Lavalle, José María Paz, Gregorio Aráoz de Lamadrid y Martín Rodríguez. | Sus líderes máximos fueron José Artigas (fundador de la Liga Federal), Manuel Dorrego, Juan Facundo Quiroga, Juan Manuel de Rosas y Justo José de Urquiza. |
El partido se disgregó tras el ascenso de Rosas y se disolvió en 1852, cuando se fundó el Partido Liberal. En 1862, este se dividió a su vez en dos: Partido Nacionalista y Partido Autonomista. | El partido se disolvió en 1874, pocos años después de la derrota militar que marcó el final de la Confederación Argentina (1831-1861) y el inicio de la “organización nacional” liderada por dirigentes liberales. |
Perdieron militarmente la lucha contra los federales, pero muchas de sus ideas políticas e intereses económicos, culturales y sociales se terminaron imponiendo. | Ganaron la guerra civil y establecieron un modelo de país federal, pero este se volvió altamente centralizado y dependiente de la ciudad de Buenos Aires. |
Sigue con:
Referencias
- Bobbio, N., Matteucci, N. y Pasquino, G. (Dirs.). (2015). Diccionario de política. Siglo XXI.
- Goldman, N. (Dir.). (2005). Revolución, república, confederación (1806-1852). Sudamericana.
- Heslop, D. A. (2025). Political system. Encyclopedia Britannica. https://www.britannica.com
- Ternavasio, M. (2009). Historia de la Argentina 1806-1852. Siglo XXI.
- The Editors of Encyclopaedia Britannica. (2025). Federalism. Encyclopedia Britannica. https://www.britannica.com
¿Te fue útil esta información?
Sí No¡Genial! gracias por visitarnos :)